Corrosión en calderas de gasoil
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Sí, tu caldera de gasóleo también puede sufrir de corrosión. Este recipiente metálico cerrado que ofrece especial funcionalidad durante el invierno, requiere de atención especial. La caldera tiene como objetivo la transmisión de calor a un fluido caloportador (agua). Y para ello utiliza la capacidad energética de un combustible, en este caso, el gasoil. A continuación veremos aspectos esenciales de su funcionamiento y también de qué hacer cuando haya corrosión.
Funcionamiento de calderas de gasóleo
La caldera suele fabricarse en acero al carbono, por ser un recipiente sometido a alta presión y temperatura. Debe recibir mantenimiento e inspección por parte de personal cualificado y ser instalada en un lugar especial. Consiste en la caldera de una cámara en donde al utilizar aire comburente, se produce la combustión y un intercambiador de calor. El calor generado pasa al fluido caloportador que llevará el calor a donde se requiera.
Por otra parte, para que comience la combustión se requiere de un comburente, un combustible y calor. El comburente está formado por nitrógeno (mayoritariamente), oxígeno, argón y otros gases (en mínima cantidad).
Tipos de calderas de gasoil
- Pirotubulares: En este tipo de calderas los humos a alta temperatura pasan por tubos rodeados por agua que se usa como fluido caloportador. Por lo general se utilizan en calefacción y en agua caliente sanitaria.
- Acuotubulares: En este caso, el agua pasa por los tubos y los gases van por la parte externa.
Problemas que presentan las calderas hogareñas de gasoil
Al igual que las calderas industriales, este tipo de calderas requieren de mantenimiento y servicio técnico especializado. Dentro de los problemas más frecuentes que presentan están la corrosión y la oxidación, sobre todo si no es de acero inoxidable. Pueden sufrir de incrustaciones, contaminaciones, formación de lodos, etc.
La corrosión se debe a bajos valores de pH (menores a 11,5) y a la presencia de acidez. Debido a esto, las partes metálicas van a disminuir su grosor y habrá formación de depósitos aislantes en tuberías. Ahora bien, en las calderas hogareñas hay que tener en cuenta que utiliza gasóleo tipo C, el cual contiene un poco de azufre. Entonces, durante la combustión se convierte en dióxido de azufre y parte de él en presencia de aire se oxida. Se convierte entonces en trióxido de azufre y los humos resultantes de la combustión tendrán vapor de agua.
Cómo ocurre la corrosión en calderas de gasóleo (y qué hacer)
En consecuencia, si la temperatura de retorno del agua es menor, habrá condensaciones y, por tanto, corrosión. Esto es, al combinarse químicamente el trióxido de azufre con el agua, se obtiene ácido sulfúrico. Este compuesto es altamente corrosivo y termina por dañar la caldera al haber condensaciones.
Para corregirlo, existen metodologías que se utilizan con el fin de elevar la temperatura de retorno. De manera que no ocurra la reacción química mencionada y la consecuente corrosión. No es un problema del gasóleo, sino de las condiciones del equipo. Para ello puede utilizarse una bomba anticondensación e, incluso, una válvula de tres vías. Conoce más sobre el mantenimiento de tu caldera de gasoil ingresando a Exclusivas Baymar. Nosotros tenemos más de 30 años de experiencia y te ofrecemos gasoil para tu caldera.
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